La hegemonía de EE. UU. agoniza. La agresividad de Washington aumenta para intentar salvarla.

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EE. UU. intenta mantener su hegemonía lograda tras la caída de la Unión Soviética, y el actual orden mundial, basado en sus reglas. Pero desde hace unos años, un nuevo bloque está emergiendo, afirma el director del Instituto Español de Geopolítica, Juan Antonio Aguilar. Así, la llegada de “un nuevo orden mundial va provocar conflictos: ningún imperio quiere morir así porque sí”, advierte el analista. “En este momento vemos que un orden unipolar, en el que Washington imponía las reglas y tenía toda una serie de zonas de influencia a su servicio, entre ellas la Unión Europea, empieza a perder poder, empieza a no poder imponer sus reglas en ciertas zonas del mundo, porque hay potencias que ya están poniendo las suyas propias, las que les interesa. Y ese choque, esa contradicción, esa fractura geopolítica a nivel global, es lo que hace que vivamos una situación de inestabilidad muy peligrosa, porque muchas veces estas cosas acaban con conflictos bélicos, incluso generalizados: ya hemos vivido dos guerras mundiales, y no se puede descartar que acabemos viviendo una tercera”, avisa Aguilar.